Historias detrás de las obras de arte.

¿Cuál es la verdadera historia de la oreja de Van Gogh?
Hay dos versiones de la historia y ambas son tan probables como indemostrables. Lo fascinante es que involucra a dos de los artistas a quienes más influencia se les atribuye sobre la pintura moderna.

Por invitación de Vincent, Paul Gauguin se instala en la «casa amarilla» donde vive el primero, en Arlés, en octubre de 1888. Éste es un hecho constatado.
La primera versión (la más difundida), cuenta que ambos genios (de temperamento terrible) van logrando que la convivencia sea un fracaso hasta que las fuertes discusiones terminan con Van Gogh atacando a Gauguin con una navaja de afeitar. Después, arrepentido de este arranque, él mismo se corta el lóbulo de la oreja para expiar su culpa (en verdad no se sabe cuánto de la oreja resulta cercenado). Se dice que se la envía a Gauguin, pero sólo logra que el otro lo considere definitivamente un loco peligroso.
La otra versión es más cinematográfica y está basada en una investigación de los académicos alemanes Hans Kaufman y Rita Wildegans (tienen editado un libro al respecto: «La oreja de Van Gogh: Paul Gauguin y el pacto de silencio»). Llega a la conclusión que las discusiones entre ambos genios terminan en una pelea donde al parecer es Gauguin, experto espadachín, quien le corta la oreja a Vincent.

Autorretrato con Oreja Vendada (1889). Vincent Van Gogh.

Historia de la Oreja de Van Gogh por 3 Minutos de Arte.

Se supone que luego, Van Gogh envuelve la oreja en una tela y se la entrega a una prostituta llamada Raquel. Y cuando pasa el momento de odio y furia, Van Gogh no quiere que su amigo sea arrestado, entonces ambos acuerdan contar a la policía la versión de la autolesión para proteger a Gauguin.
En definitiva, la historia (en cualquiera de sus versiones) nos confirma que estos artistas de sensibilidad y talento sobrenatural también son muy humanos, tanto en sus pasiones como en sus lealtades, tanto en sus grandezas como en sus miserias.