Revisando Arco 2019
Eugenio Merino (Madrid,1975) y Santiago Sierra (Madrid,1966) ya eran conocidos en el panorama artístico contemporáneo antes de Arco Madrid 2019. Sus trayectorias artísticas han tenido como elemento común el cuestionamiento de los sistemas políticos actuales. En la última edición de Arco presentaron en común una pieza que, quizá, no fue la obra de más calidad de la Feria y tampoco la de mayor transcendencia en el coleccionismo internacional. Sin embargo, el famoso ninot del Rey tuvo una repercusión mediática que prácticamente anuló a todo el trabajo artístico de su alrededor.
La delicadeza de las obras de Ana Teresa Barboza (Lima,1981) donde conjuga varios de los factores característicos de la representación artística contemporánea del Perú, como es la defensa del medio ambiente, la utilización de las técnicas tradicionales peruanas como el telar, el uso de técnicas propias del arte contemporáneo y un preciso estilo estético no fueron motivo de comentario por los medios.
Los trabajos de Sandra Gamarra (Lima,1972) mucho más conocida en el mercado del Arte contemporáneo occidental ya que reside en Madrid y trabaja para la galería Juana de Aizpuru desde hace años, tampoco han sido dignos de debate en los medios a pesar de la denuncia evidente que plantea en sus trabajos sobre las consecuencias del colonialismo y sus resultados en la ocultación de un arte iberoamericano anterior.
Carlos Motta (Bolivia,1978) a través de sus videos y fotografías donde se autorretrata de manera cruel denunciando la homofobia presente en nuestra sociedad, consiguiendo alterar la comodidad del espectador, tampoco tuvieron cabida en los medios.
El activismo político de Jenny Holzer (Ohio,1950) en torno a las directrices de la sociedad actual y su reflexión sobre la ocultación de información a los ciudadanos occidentales en una de sus piezas presentadas en Arco, donde nos muestra como los documentos desclasificados por la CIA del 11 S tienen párrafos eliminados, de forma que parte de lo que ocurrió nunca lo sabremos. Quizá este tema podría ser atractivo para los medios, pero tampoco ha tenido transcendencia, o Helena Almeida (Lisboa,1934-Sintra,2018) como artista fundamental para comprender la presencia de la mujer en el Arte contemporáneo occidental además en el año de su muerte, tampoco fue suficiente contenido para tener presencia en los medios…
Podemos pensar que es lógico que los valores nuevos del mercado del Arte Contemporáneo no tengan presencia en los medios generalistas y también que el hermetismo del lenguaje en la representación artística actual requiera demasiado tiempo para ser explicado y desarrollado en un mundo de inmediatez y simplificación como muestran los medios de comunicación. De manera, que dar transcendencia mediática a artistas como el Paquistaní Waqas Khan (Akhtarabad,1982) y su discurso visual sobre la meditación es imposible y para eso están los medios especializados. Sin embargo, autores que tratan sobre los problemas en los derechos sociales, no están tan lejos de nuestra cotidianidad y, a pesar de ello, son obviados. ¿Por qué? Quizá un ninot nos pueda dar la explicación.
Abril 2019